1º CICLO DE ÉPOCA DEL CLUB DE LA MANZANA

LA GRAN DEPRESIÓN AMERICANA

LECTURAS

17 de enero: De ratones y hombres de John Steinbeck
El Villorio de William Faulkner
¿Acaso no matan a los caballos? de Horace Mc Coy


Club Social de Aljarasol en Mairena del Aljarafe, Avda. de la Constitución a las 19:00.

jueves, 24 de febrero de 2011

I CONCURSO DE MICRORRELATOS DEL CLUB DE LA MANZANA

Hoy os proponemos participar en el 1º Concurso de Microrrelatos del Club de la Manzana 2011.  El tema del concurso es "El Libro".
 

Las reglas son muy sencillas:

1º Enviar el microrrelato del 1 de marzo de 2011 al 31 de mayo de 2011, a COMENTARIOS del presente post.
2º El microrrelato deberá tener entre 100 y 250 palabras.
3º Deberá incluir un título.
4º No hay límite de microrrelatos, podréis mandar tantos como queráis.
5º El plazo de votaciones empezará el 1 de junio de 2011 hasta el 15 de junio de 2011.
6º La persona ganadora se dará a conocer el 20 de junio de 2011, en un nuevo post en el que se publicará su microrrelato .

El premio es el libro "Criadas y Señoras" de Kathryn Stockett.  Elegido por mayoría como el mejor libro que se leyó en el club en el año 2010.

Los microrrelatos se podrán votar a través de COMENTARIOS del presente post.  Cualquier persona puede participar y ejercer de jurado, no es necesario que sea seguidora del blog,  Cuantas más participaciones y opiniones tengamos mejor será.

¡Animo! Estamos deseando recibir vuestras historias.

miércoles, 23 de febrero de 2011

PLENILUNIO - Antonio Muñoz Molina

Unos ojos que en este mismo instante miran en algún lugar de la ciudad, normales, serenos, como los ojos de cualquiera.
En una ciudad de provincias alguien con un rostro soluble en los demás rostros esconde el enigma de un espantoso crimen. Es preciso encontrar su mirada entre la multitud, descifrarla, para conjurar el horror.
En torno a la búsqueda, varios personajes, cada uno con un secreto royéndole el corazón, sueñan durante un instante con dar un nuevo sentido a sus vidas. En la hora mágica del plenilunio.

martes, 22 de febrero de 2011

DESCANSA EN PAZ - John Ajvide Lindquist

PROPUESTAS DE LECTORES (Lula)

Buscando “Déjame entrar” en la biblioteca (por supuesto no estaba disponible) encontré este “Descansa en paz” que es posterior. Es una historia de zombis pero nada que ver con los walking deads de la tele, no persiguen a la gente para comérsela, solo quieren volver a casa, continuar con su vida. En Estocolmo una tarde muy calurosa los muertos recientes vuelven a la vida y quieren volver a casa con sus familiares. El libro se centra en unos personajes con sus historias particulares y también nos cuenta los problemas de todo tipo que se les presentan a las autoridades y de que manera intentan solucionarlos. El libro me ha gustado mucho, Lindquist es un gran narrador y tiene una manera muy destroyer de presentar una historia tan macabra. Estos suecos son muy raros, a este “incidente” le dan un tratamiento de lo más normal: hay unos problemas y hay soluciones. Punto. Esta historia en manos de Stephen King hubiera dado para setecientas páginas, muchas derivaciones y un final catastrófico.
Precisamente lo que no me ha gustado es el final. No es que sea de las que pretenden un final categórico ni mucho menos, me gustan los finales abiertos, pero es que en este libro no hay final, no hay un atisbo de porqué los muertos reviven, ¿para qué se nos cuentan las historias de unos personajes si despues los abandona de mala manera?
Bueno compañeros si alguien se anima a leerlo me gustaría intercambiar opiniones. 

lunes, 21 de febrero de 2011

EL OJO DE LA LUNA - Anónimo (Segunda parte de El Libro sin nombre)

PROPUESTAS DE LECTORES (Sales)

Esta estupenda secuela de “El libro sin nombre” comienza justo tres días después de la masacre que tuvo lugar durante el eclipse del festival lunar de Santa Mondega y que dejó sus calles empapadas en sangre.
Sánchez, el sacrílego camarero del Tapioca tiene de nuevo un peligroso inquilino escondido en el desván. La joven pareja de amantes, Dante y Kacy, se ven obligados a volver a la ciudad para salvar sus vidas y Peto, el monje Hubal portador del Ojo de la luna, regresa en busca del más despiadado, escurridizo y sobrenatural asesino en masa, autor de la matanza, en paradero desconocido desde ese día, Kid Bourbon. Pero Kid Bourbon está más cerca de lo que ellos pueden imaginar y planea llevar a cabo la venganza definitiva que deje descansar su espíritu.
La noche de Halloween se acerca y en la ciudad bandas de vampiros, clanes de hombres lobos, adoradores del diablo y una momia escapada del Museo de Historia se destrozan los unos a los otros en una vorágine de maldad y violencia.
Mientras tanto, en medio de este infierno, Beth, quizás la única mujer normal y no contaminada de toda la ciudad, se consume en los recuerdos de una traumática experiencia vivida de adolescente. Su vida está vinculada de manera irremediable al muelle de Santa Mondega, que de alguna manera le da la fuerza para luchar contra sus temores. A este muelle acude cada víspera del día de Todos los Santos desde hace dieciocho años. ¿Por qué esta allí? ¿A quien espera? La explicación la encontramos en un largo flash back de trece capítulos que nos relata acontecimientos pasados y nos aclara los orígenes de Kid Bourbon , el más sanguinario de los homicidas de esta horripilante ciudad. Sabremos cómo descubrió la existencia de vampiros en Santa Mondega, cual fue su primera víctima, a quién protege con tanta devoción, el motivo de su insaciable e implacable sed de venganza y su gusto desmedido por el alcohol.
Más espeluznante, más excitante, más rápida, más furiosa y más sangrienta que su predecesor, este libro es de esas raras excepciones que confirman la regla de que nuca segundas partes fueron buenas.

domingo, 20 de febrero de 2011

CUENTO DE RAÚL

Carta (irremediablemente perdida hace años) de Elena Salgado a su íntima amiga Alicia Cánepa
 
Pergamino, 6 de febrero de 1958
 
Querida Alicia:
 
Todavía no entiendo por qué te fuiste a Mar del Plata con tus padres en vez de venirte conmigo a “La Perdicera” o si es que ellos te obligaron y ahora te tenés que embromar porque ya estarás de vuelta en Buenos Aires con el calor que hará allá, y yo aquí hecha una reina con toda la estancia para mi sola. No te digo que no me guste la playa pero será que vengo al campo desde chiquita y todo lo de aquí me gusta. Igual quisiera que estuvieras conmigo para que me ayudaras a pensar porque me parece que me voy a volver loca!
 
Te cuento: hay un muchacho que trabaja acá de toda la vida, que vos no te acordarás pero lo has visto otros años, pero no sé porque antes estaba poco aquí porque estaba más en la casa del puestero, que era el padre. Bueno; el padre se murió y ahora Goyo  (se llama Gregorio pero le dicen Goyo) está acá con los caballos.  Él es más grande que yo. Me debe llevar como cinco años porque creo que tiene veinte o veintiuno ¡y es tan buen mozo! Tiene el pelo negro, negro, pero tiene ojos azules. Yo creo que sale a los abuelos, que eran irlandeses y eran igual a él. Y tiene la cara bronceada por el sol porque está todo el día por ahí, al sol. Lo que no me gusta es que como usa siempre sombrero, cuando se lo saca le queda la mitad de la frente blanca y eso no me gusta. Igual que la vez pasada, que lo vi cuando se estaba lavando las axilas en la bomba de agua del patio de atrás, y como siempre está con la camisa con las mangas arremangadas, tiene los brazos tostados pero el pecho y la espalda blancos casi azulado de tan blanco ¡puaj! Pero si fuera mi novio yo lo haría tomar sol desnudo como dicen que se ve en las cintas francesas.¡ja,ja,ja!
 
Pero ahora, Alicita, estoy metida en un lío porque él se lo pasa mirándome con esa media sonrisa que me vuelve loca, pero no me dice nada porque no es de hablar mucho. Pero me mira todo el tiempo.
 
El otro día (anteayer, para ser más precisa) yo no podía dormir la siesta por el calor y me levanté a tomar agua de la bomba esa que te dije, la del patio de atrás, que el agua sale fresquita y es riquísima.  Bueno, yo estaba por servirme pero soy medio estúpida que no sé tomar del pico y no me había llevado un vaso de la cocina y pasó él cruzando para los galpones y me vio. Me preguntó si quería que me ensillara un caballo para pasear  pero le dije que no, y vino y se puso a bombearme el agua para que yo tomara con las manos . Yo estaba tan nerviosa que juntaba el agua con las manos pero no podía dejar de mirarlo ¡Ay, Alicia! Yo me quería morir ahí mismo y él no decía nada y me miraba y miraba cómo se me escurría el agua por los brazos y me mojaba el vestido y las piernas. Al final igual tomé un poco y le dije gracias pero él me dijo “sos linda vos, eh?” y me empujó despacito contra la pared y me quiso besar.
 
Yo le saqué la cara rápido, que después me arrepentí porque me hubiera gustado que me diera un beso que seguro que me lo daba con la boca abierta y la lengua todo eso. ¡Ay, mirá las cosas que te cuento! Bueno, che... para eso somos amigas íntimas, no? Ja, ja, ja! Al final resulta que como yo le saqué la cara él me empezó a besar el cuello  y yo no le decía nada, la verdad, porque me gustaba y aunque él estaba todo transpirado a mi no me daba asco.
Pero después me empezó a manosear toda y eso sí que no quise y encima que si me llegaba a ver mi hermano (Carlitos, el más chico, porque Pablo está en Buenos Aires) que siempre anda por ahí dando vueltas por todos lados, se iba a armar un desastre. Además que cuando me empezó a toquetear me desilusionó porque yo no sé si él gusta de mi en serio y además que aunque él a mi me guste, si llega a saber mi papá lo que pasó me mata y lo mata a él me parece.
 
Bueno; al final lo empujé y le dije que era un estúpido y me fui corriendo para la cocina, que no sé cómo hice porque las piernas me temblaban y él se fue caminando despacio para los galpones porque yo me quedé espiándolo desde la ventana de la cocina y él no me podía ver.
 
Ahora me quiero morir porque yo me arrepentí de decirle que era un estúpido pero tengo miedo de decírselo y que se crea que le estoy dando permiso para que me agarre otra vez. A lo mejor yo lo dejaría que me bese bien pero no que me manosee porque me hizo sentir sucia, como Victoria ¿te acordás? La chica inglesa del radioteatro que escuchamos, que caía en manos de los nazis pero ella se enamoraba del centinela pero que él no la amaba y solo quería divertirse ¡pobre! Bueno; a mi me pasa como a Victoria pero en mi propia vida real.
 
Me duele la mano de tanto escribirte. Me parece que es la carta más larga que escribí en mi vida. Te manda un beso grande, tu amiga del alma
 
Elena
 
Hace dos dias que llueve sin parar y como los caminos están intransitables no ha podido ir nadie al pueblo y no pude mandar todavía esta carta. Igual no pasó nada nuevo porque ahora cuando me lo cruzo a Goyo casi ni me mira y al final no sé si lo único que quería era darme un beso y no le importo nada. Así que ahora lo que quiero es irme de aquí pero hasta que no venga mi padre estoy en una prisión, como Victoria! Ja, ja, ja! Cómo me hacen falta tus sabios consejos!
 
 
 
 
 
                                                            2
 
Carta de Elena Salgado a su madre
 
 
Pergamino, 21 de julio de 1987
 
Querida mamá   :
 
No sabés lo que me cuesta escribirte mami. Hace dos días que llegué y todavía no hago más que dar vueltas y vueltas sin decirme a empezar con las cosas de Carlos. Venir a la estancia me hizo bien y mal. Las dos cosas. Por un lado, porque revivo tantos veranos pasados con mi Carlitos querido, que todavía no termino de creerme que sea verdad que se haya ido. Y menos con un accidente tan estúpido.
 
 No sé si los padres tenemos hijos preferidos. Supongo que un poco sí, pero no lo confesamos. Pero sí sé que uno tiene hermanos preferidos. Y no lo digo porque a Pablo no lo quiera; vos sabés que sí,  con toda el alma. Pero a veces ocho años es mucha diferencia y a él siempre lo ví como un hermano muy mayor. En cambio con Carlos era distinto. No digo que por dos añitos que le llevaba yo me sintiera un poco madre suya, pero me gustaba cuidarlo, tenerlo cerca y disfrutarlo, como un juguete mío, con lo delicado y amoroso que era...¡Ay, qué boba soy! Mirá a quién se lo estoy diciendo.
 
 ¡Y ahora me entero que era un  ratón guardatodo! Hay tantas cartas, cuadernos viejos (¿?) papeles y carpetas!
Espero juntar coraje y ponerme a ver, a leer y a ordenar todo esto. Supongo que algunas cosas las tiraré, otras me las quedaré de recuerdo (creo que a Carlos no le hubiera molestado) y algunas te las  dejaré en tu casa cuando vuelva a Buenos Aires.
 
Por cierto: mientras regreso, quiero que te vayas pensando la posibilidad de quedarte con nosotros. Al fin de cuentas ¿qué vas a hacer sola en ese piso tan grande en la Capital? Te aclaro que esto yo la lo hablé con Aníbal hace tiempo y él no tiene ningún problema. Al contrario. Sabés que te quiere muchísimo y las nenas ni hablar. Estarían más que felices con vos para malcriarlas jajaja!
 
Lo que no sé es cómo te sentís en Montevideo. Pero mirá: vos sabés que cuando lo destinaron a Aníbal a Uruguay, yo creí que me moriría de tristeza. Y ya ves cómo cambia uno. Hoy no te cambio Montevideo por la locura de BsAs ni soñando!
 
Bueno mami, decile a las nenas que les llevaré algo de regalo y que las adoro; y a Aníbal que digo yo que sé que está muy ocupado (pobre!) pero que no sea vago y me llame. Te mando un beso grande
 
 
Elena
                                                    3
 
 
Del Diario íntimo de Carlitos Salgado
 
 
6 de febrero de 1.958
 
“Si ese porquería de Goyo se cree que por lo que paso hoy a la siesta me tengo que aguantar callado sin hacer nada por miedo a que él diga algo, esta muy equivocado.  Lo que tengo es una rabia que lo mataría y lo voy a hacer echar. No se como, pero ese degenerado me las va a pagar.
A mi nunca me importó que el haraganeara en los galpones y hasta le estoy agradecido que me enseñó a fumar. Yo siempre creí que somos amigos pero el es grande y sabe que no me tiene que mostrar lo que no son cosas mías y que lo que hizo esta mal. ¿por qué tuvo que esperar a que yo lo encontrara en los galpones, que yo creía que estaba fumando y haraganeando como siempre, para desabrocharse la bragueta y sacar todo afuera? Yo tengo 13 años y no soy tan tarado como para no saber lo que estaba haciendo y si  se me saltaban las lágrimas no era por eso sino por la rabia, porque yo lo miraba fijo para que le diera vergüenza y a lo mejor el estúpido se pensaba que yo quería ver como le salía la leche esa de porquería y me llamaba despacito que me daba asco. Y además ¿para qué me llamaba si estaba tan contento con sus porquerías, eh? Pero yo me aguanté  firme porque a lo mejor él se creía que yo me iba a asustar y me iba a ir corriendo como una nena y le mostré que yo me iba cuando yo quería. El Goyo es una porquería y no sé que voy a hacer pero algo haré.
 
 
                                                      4
 
 
Carta de Carlos Salgado a Gregorio Cardenal
 
Buenos Aires, 19 de marzo de 1972
 
Goyo  :
 
Ya sabés que falleció el viejo. Pablo te habrá llamado me imagino, y lo habrás visto en el diario.
 
Te aviso que voy para allá. Arreglé con Pablo que me ocuparé de “La Perdicera” porque él solo y clavado en Buenos Aires como está,  ocupado con el campo de Cañuelas y con la Textil que no va muy bien, no puede atender también a la estancia. Por eso volví de Barcelona.
 
Mirá Goyo: hace como cuatro años que no piso el campo y ahora que tengo que volver un poco a la fuerza y que voy a estar mucho tiempo allí, no quiero volver al mismo infierno de siempre. Me gustaría que termines de entenderme de una buena vez. Me fui a Europa por eso y no quiero sufrir más ¿entendés?
 
Pero lo que quiero, Goyito, es que estemos bien y que entiendas que no podemos volver siempre a lo mismo, que hoy quiero y que mañana no quiero.  Yo te extrañé todo el tiempo y ya ves que para volver no me pongo en patroncito. Creo, de veras, que si te portás bien podemos... Bueno; no quiero escribir más. Ya hablaremos.  Llego a Pergamino el jueves de la próxima semana , a eso de las siete de la tarde.  Pero no quiero ir derecho a la estancia.  Reservame una habitación buena en la hostería Los Baguales, la de la ruta.  Y andá a esperarme ahí, así charlamos.
 
Espero que no seas sonso y  que me entiendas y que el jueves te quedes conmigo, así charlamos tranquilos. Disculpá la letra.
 
Carlos
 
PD: El jueves llevá esta carta con vos porque quiero que me la devuelvas. No te olvides.
  
 
                                                    5
 
 
Carta de Elena Salgado a su hermano Pablo
 
Pergamino, 23 de julio de 1987
 
Querido Pablo  :
 
Ya terminé de poner en orden todos los efectos personales de Carlitos.  Creeme que no ha sido fácil. Te lo digo porque además de la ropa, los relojes, las no sé cuántas camisas  y esas cosas, había  mucho papelerío, que fue lo peor.  Y porque me resultó bastante triste revisar cosa por cosa, pobre, y seleccionar y decidir qué guardaremos y qué tirar, como me encargaste. 
 
Como le dije a mami, me quedo con algunas cosas para mi y otras las guardo para llevárselas a ella.  Yo me iré para Montevideo lo antes posible. Total, sé que vos te vas mañana a Gualeguaychú y no se sabe cuándo volvés (no soy adivina; me lo dijo tu secretaria ayer por teléfono. Ya te habrá dicho que llamé). Así que cuando regreses, me hacés  una llamadita y yo me cruzo a BsAs a verte.  Y de paso te cuento cómo va el proyecto de que mami se quede conmigo en Montevideo. Creo que dirá que sí. Espero que me lo agradezcas algún dia, malo!
 
Aparte de todo esto, te quiero pedir algo muy especial y que desde ya te adelanto que no me podés negar. Se trata de algo muy, muy personal cuyas razones (te pido mil disculpas) no te puedo explicar. Mejor dicho: no quiero explicarte. Vos sabés que nunca te pedí nada, y no porque no seas generoso o comprensivo, sino porque nunca hizo falta. Pero siempre conté con vos. Y hoy cuento con vos para hacer esto, que sé que es delicado y que tiene que ver con las cosas que vos manejás. Tampoco pierdo de vista que lo que te pido tiene que ver con Explotaciones Agropecuarias Salgado de la que, al fin de cuentas, yo soy de alguna manera socia o lo que sea. Sabés que nunca me metí.
 
Resumiendo, lo que quiero es que sin preguntarme por qué, lo despidas a Goyo Cardenal. No sé qué le vas a decir ni me importa. No se trata de que haya robado ni nada de eso. Ni que me haya faltado el respeto. O sí, pero no tanto a mi, que sabría defenderme,  ni del alguna forma que te puedas imaginar ,ni de ningún modo que quiera explicarte ahora.  No sé. Ustedes ahí, en la oficina, saben cómo hacer esas cosas. Y como no te dejo ninguna alternativa (perdoname), te lo agradezco desde ahora.
 
Te mando un fuerte abrazo (pero fuerte, fuerte, eh?)
 
Elena
 
  
                                                              6
  
Carta de Explotaciones Agropecuarias Salgado SA a Gregorio Cardenal
 
Buenos Aires, 31 de julio de 1987
 
At: Sr.Gregorio Cardenal
 
De nuestra mayor consideración  :
Lamentamos informarle que la Dirección de esta empresa,  obligada por insalvables causas de fuerza mayor, ha decidido prescindir de sus servicios a partir del dia de la fecha.
 
Toda vez que tales causas no han sido óbice para que se practicara
sin mermas ni quita alguna la indemnización que corresponde a los años trabajados, nos sentimos eximidos de explicarlas.
 
Los haberes calculados están a su disposición a partir del dia de mañana, 1º de agosto del cte.año en nuestras oficinas. Así mismo, le serán reintegrados, en el mismo acto de su liquidación,  los gastos emergentes de su traslado a esta Capital para el cobro. .
 
Atentamente,p/ Explotaciones Agropecuarias Salgado S.A.I.C.y F
 
Aurelio Chávez
Departamento Contaduría y Personal.

martes, 1 de febrero de 2011

4ª FASE DE LA CREACIÓN DE UN RELATO A PARTIR DE PALABRAS SUELTAS

Empezamos la 4ª Fase de esta iniciativa del club de la manzana.  Se trata de la 4ª y última fase, y esta vez todos trabajaremos juntos para que con la colaboración de todos terminemos el relato que más nos haya gustado.
A partir de hoy cada uno podrá votar tres relatos numerándolos del uno al tres.  Siendo como siempre el uno el relato que más nos haya gustado. Una vez hayamos votado todos, se publicará el relato que más votos reciba y a partir de entonces en cada reunión trabajaremos juntos para terminar la historia.
El plazo para esta votación termina el 22 de febrero, con idea de poder publicar el resultado antes de la reunión del próximo mes.
Para faciltar la elección os incluyo un cuadrante en el que aparece el último redactor del relato y un nombre provisional con el que poder indicar al futuro relato conjunto.


ÚLTIMO REDACTOR
TÍTULO RELATO
Mª Carmen
 Un mal sueño
Teresa
Inocente de éste crimen
Lula
El artefacto del viajero
Reyes
Robar a un cadáver
Arturo
Visita guiada
Raúl
Tip, Tap, Tip
Sales
Sin esperanza
Mariuca
Destino el Sur
Caty
Habitación vacía
Marga

Yeyi
El viejo arcón

El comisario Gutiérrez