
martes, 30 de abril de 2013
KAFKA EN LA ORILLA de HARUKI MURAKAMI

lunes, 29 de abril de 2013
FOTOS DEL CLUB Y PRÓXIMO ANIVERSARIO
Esta asociación dedicada al libro y cuya celebración será el próximo 6 de julio, no solo va a consistir en una estupenda cena, sino que contará con algunos regalos para sus miembros y varias representaciones (que todavía son una sorpresa).
Nuestra compañera Elvira como introducción a este próximo encuentro, nos ha hecho un montaje con las fotos de algunos de los eventos que se han realizado durante el año para que podamos disfrutarlos todos.
jueves, 25 de abril de 2013
EL TERCER HOMBRE de GRAHAM GREENE

viernes, 5 de abril de 2013
OTROS MUNDOS (Este mes en el Periódico de Mairena)
LA CIENCIA
FICCIÓN (Lula)
La ciencia ficción o
ficción especulativa es un género literario en el que se relatan
acontecimientos imaginarios fundamentados en las ciencias físicas, naturales,
sociales, etc. La acción puede estar relacionada con los viajes espaciales,
mundos y civilizaciones alienígenas, hecatombes mundiales y la evolución de la
sociedad humana posterior, mutaciones, inteligencia artificial, robots,
androides, los viajes en el tiempo, las sociedades futuristas.
Kate Wilhelm, escritora
veterana del género, define la ficción especulativa como “la exploración de mundos que probablemente nunca existan, en cuya
realidad no creo, que no espero que el lector acepte como reales, pero que son
manejados en forma realista para investigarlos porque, por una u otra razón,
son los mundos que más nos asustan o nos atraen”
Algunos de los subgéneros
son las Distopías: Una sociedad ficticia indeseable. “Un Mundo Feliz” Aldous Huxley, “1984” George Orwell, “Fahrenheit 451”
Ray Bradbury; las Ucronías: Novela histórica alternativa, ¿que pasaría si
aquel hito histórico no ocurrió? “Edén”
Harry Harrison, “Roma Eterna” Robert Silverberg; las Space Opera novelas de
aventuras con héroes, villanos, romanticismo y acción en escenarios futuristas.
El término Ciencia Ficción
se debe al editor Hugo Gemsback quien,
en 1926 lo incorporó a la portada de la revista Amazing Stories, aunque la historia de la ficción especulativa es
mucho más antigua. Algunos estudiosos se remontan a “Utopía” de Tomas Moro (1516).
Otros títulos de obras precedentes son “Somnium”
de Johannes Kepler (1623), “El Otro Mundo” de Cyrano de Bergerac (1657) y la que muchos consideran la precursora por
excelencia “Frankenstein” de Mary Shelly (1818)
En el siglo XIX,
coincidiendo con la Revolución Industrial, la ciencia se pone de moda y muchos
autores basan las acciones de sus novelas en temas científicos, es el caso de Julio Verne quien incluso anticipa
inventos como el submarino o el cohete. Otro escritor destacado fue H.G. Wells, éste, además de tratar la
fantasía científica, incidió en la crítica social, al igual que Robert Louis Stevenson en su “Dr. Jekyill y Mr. Hyde” lo hizo sobre la
condición humana. Edgar Allan Poe, en
algunos de sus relatos, escribió sobre
mesmerismo y especulación cosmológica. Mark
Twain “Un yanki en la corte del Rey Arturo”,
Jack London “El talón de hierro”, Edgar Rice Burroughs y sus “Ciclo
de Marte” y “Ciclo de Venus” y un
amplio etcétera.
El desarrollo de la
ciencia ficción como género es básicamente estadounidense y comienza en 1926
con la fundación de la citada Amazing
Stories del editor Hugo Gemsback, dedicada exclusivamente al
género. Otras como Weird Tales
siguieron el camino. Eran publicaciones en papel de pasta (pulp), muy baratas,
con historias cortas ilustradas con gran fantasía y no tenían mucha
consideración en el ambiente literario pero en ellas publicaban autores, actualmente
tan reverenciados, como H. P. Lovecraft,
Robert Bloch o Frizt Leiber.
El periodo entre 1930 y
1950 es la considerada Edad de Oro del género y el editor John W. Campbell con su revista Astounding
Sciencie Fiction el impulsor y descubridor de talentos. En esa época
despuntan los clásicos Arthur C. Clarke,
Isaac Asimov, Robert A. Heinlein, Clifford D. Simak, Ray Bradbury.
Karel Capek, un escritor checo, utiliza por primera vez la palabra y el
concepto robot. Se empiezan a
publicar estos relatos en ediciones de libros separadas de las revistas.
De 1950 a 1965 es la Edad
de Plata, acabó la Segunda Guerra Mundial y la amenaza atómica es un hecho. Se
consolidan los autores que empezaron en
el periodo anterior y aparecen otros como Philip
K. Dick, Poul Anderson, Frank Herbert, Stalislaw Lem.
En 1960, la Nueva Ola con
autores como J. G. Ballard es un
periodo de experimentación literaria. Hay menos revistas y más editoriales y
colecciones especializadas.
En 1980, con la revolución
que supuso el inicio en el uso masivo de las computadoras, llega el Cyberpunk, corriente
de la ciencia ficción muy influenciada por la novela negra, que nos presenta
una sociedad con alta tecnología y bajo nivel de vida, desintegración social
con megacorporaciones dominantes contra las que luchan hackers perdedores. Su
novela representativa “Neuromante” de
William Gibson
Desde 1990 El
Postcyberpunk incide y profundiza en los mundos virtuales y las redes,
incluyendo la nanotecnología y la ingeniería genética. Su novela “Show Crash” de Neal Stephenson Estas dos corrientes de la ficción especulativa nos
presentan un futuro cercano y no muy agradable.
Actualmente está de moda
el Steampunk, ficción anacrónica centrada en la época victoriana y la
tecnología del vapor, un autor Tim Powers,
otro: nuestro Félix J. Palma
En otra ocasión hablaré de
la ciencia ficción escrita en español y de las editoriales españolas. También
de las escritoras que, en este mundo, cuyos comienzos fueron eminentemente
masculinos, aportan puntos de vista muy interesantes.
Sólo decir que la novela
de ciencia ficción que más me ha gustado en años es “Lágrimas en la lluvia” de
Rosa Montero, está escrita por una mujer y en español.
He intentado dar una
visión amplia de lo que es la ciencia ficción. Si se profundiza un poco en
ella, no trata sólo de marcianitos verdes, naves espaciales y viajes imposibles.
La ficción especulativa, como toda la literatura, en realidad habla de
nosotros.
Como en otros géneros
literarios la hay buena, mala o regular, se trata de no tener prejuicios y
acercarse a ella con mente abierta, con ánimo de explorador, seguro que, al
final del camino, el lector encuentra el premio prometido.