1º CICLO DE ÉPOCA DEL CLUB DE LA MANZANA

LA GRAN DEPRESIÓN AMERICANA

LECTURAS

17 de enero: De ratones y hombres de John Steinbeck
El Villorio de William Faulkner
¿Acaso no matan a los caballos? de Horace Mc Coy


Club Social de Aljarasol en Mairena del Aljarafe, Avda. de la Constitución a las 19:00.

sábado, 17 de marzo de 2012

II CONCURSO DE MICRO RELATOS DEL CLUB DE LA MANZANA

El Club de la Manzana convoca el II Concurso de Micro relatos del Club de la manzana con el tema:  "LONDRES". 
 
Los micro relatos se colgarán a través de "comentarios" de éste post desde hoy día 17 de marzo y hasta el próximo 30 de mayo.
Del 1 al 15 de junio se podrán realizar las votaciones a los micro relatos y el fallo se dará el 1 de julio.
Este año el premio consiste en el libro "La mano de la buena fortuna" de Goran Petróvic, votado por los miembros del Club como el mejor libro leído por todos sus participantes durante el año 2011.
No es necesario ceñírse completamente a lo que pueden ser las "reglas" de los micro relatos, pero para todas aquellas personas que quieren saber más o menos en que consiste, pueden leer el post de Mis Lecturas, "Los Micro relatos", que incluyen unas indicaciones básicas.
Os adjunto el enlace: 
http://mislecturassemanales.blogspot.com/2010/10/los-micro-relatos.html.
Esta iniciativa no es sólo para las personas que vienen en persona a las reuniones o pertenecen al club, desde aquí invitamos a todos aquellos interesados a participar.

12 comentarios:

Sales dijo...

The Ripper.

Odiaba la niebla. Esa maldita niebla espesa como sopa de guisantes que lo cubría todo. Merodear por el East End en noches como esa acababa con su paciencia y con su humor.
Podía percibir cómo alguien la seguía, notaba su presencia a cada paso, al doblar la esquina, al cruzar la calle. Pensó que quizás fuera un posible cliente. No fue hasta que lo tuvo sobre ella y pudo verle los desquiciados ojos, cuando se dio cuenta que su vida corría peligro. Una afilada y enorme hoja de cuchillo se dejó ver un momento entre la densa opacidad lechosa del callejón. Notó al instante cómo el helado acero penetraba en su cuerpo y supo que iba a morir.
Siempre se preguntó cual sería la sensación que deja la muerte. Ahora sabía que no es exactamente dolor… Es la ausencia de toda esperanza.

El hombre se sintió poderoso cuando la luz de los ojos de la mujer dejó de resplandecer, consciente de que nunca más mostrarían ese brillo lascivo. Le gustaba sincronizar los últimos espasmos, hacer coincidir los últimos latidos con su éxtasis. Momento casi místico. La vida y la muerte entre sus manos.
Buscó la biblia que siempre llevaba consigo en un ensangrentado saco de cuero, al lado de unos corazones marchitos, restos de otros sacrificios. La tomó entre sus manos y preguntó: ¿Es tu voluntad? !Sí! !Sí! Respondieron gritos de júbilo en su cabeza.
Jack sonrió al comprender que Dios tiene caminos misteriosos para cumplir su voluntad.

yeyi dijo...

La mujer construida

Me la encontré después de muchos años sin verla. Gloria y yo siempre habíamos hablado de cuanto nos gustaba Londres, era nuestra ciudad ideal, siempre a la vanguardia, la ciudad y también nosotras. 
Gloria se convirtió pronto en mi mejor amiga, bueno, en mi única amiga. Mi grupo, con el que salía habitualmente, había ido emparejándose y yo, la rarita, me fui quedando cada vez más sola. Pero cuando la conocí, el mundo se abrió de nuevo ante mi.  Gloria, siempre alegre, poniéndose el mundo por montera, haciendo y diciendo en cada momento lo que deseaba.  Nos gustaba la misma música, las mismas vanguardias y la misma estética.Y por supuesto el mismo hombre. Por suerte para mi, él solo se fijo en ella. 

Desde entonces, cada vez la fui viendo menos, y mi corazón me decía que su luz se estaba apagando, ella sonreía, pero con un hálito de tristeza en sus ojos y en la comisura de su boca.

Pasaron años, demasiados. A menudo la recordaba, la siempre añorada Gloria. Mi amiga, mi única amiga.

Y tras  quince años, y como muchos turistas, aproveché un puente, un vuelo barato y me fui a Londres, ¿por qué no?, llevaba demasiado tiempo postergando ese viaje, mi viaje soñado. Y paseando por Soho creí reconocerla. No podía ser ella, y sin embargo era Gloria. ¿Cómo imaginar que el destino nos situaría en esta ciudad a las dos después de tanto tiempo? 
Nos saludamos, nos reconocimos en nuestras miradas, que eran las de antaño. El tiempo no fue justo con ella, la trató mal, tan mal como aquel hombre del que ambas estuvimos enamoradas. Me contó su historia, dura y amarga. El la vejó, la humilló, la maltrató durante demasiado tiempo y ella se lo consintió todo porque era una droga de la que no podía prescindir, una y otra vez lo perdonaba y olvidaba el daño que le hacía. Pero un día él fue demasiado lejos, y tras una paliza la dejó abandonada, casi muerta. Gloria me contó como después ella se marchó de su ciudad, huyendo de ella misma, de en lo que se había convertido y encontró refugio en su paraíso perdido, Londres. Ahora,- me contó-, me levanto cada mañana y me construyo, y cuando llega la noche, noto como mis piezas se han ido cayendo a lo largo del día, y a la mañana siguiente vuelvo a reconstruirme. Esa es mi vida, un permanente juego de construcción, en la que cada pieza es uno de mis sentimientos, de mis recuerdos y parte de mi vida.

Maria Luz dijo...

Visitas culturales

Cuando a la Susie se le mete algo entre ceja y ceja no puedo con ella, lo mejor es seguirle la corriente. Llevaba dos semanas dale que te pego con el temita, que si no hacemos nada, que todos los días lo mismo del trabajo a casa y después al pub, a beber y ver fútbol, que no salimos del barrio, que vivimos en Londres, una ciudad que viene gente de todo el mundo a visitarla y nosotros ni la conocemos. En resumen, aquí estamos, ella entusiasmada con su plano en la mano correteando y mirando embobada y yo con los pies cocidos por las botas. Menos mal que hemos cogido un Big Bus Tours, pero se puede bajar a ver de cerca los monumentos y la Susie no ha dejado ni uno por recorrer. Tengo que reconocer que todo era muy chulo, el Palacio de Buckingham, donde vive la reina, es una pasada, el Parlamento, el Big Ben, la Torre de Londres, es guapísimo verlo así en vivo, mejor que por la tele. En Jubilee Gardens nos comimos unos perritos calientes tumbados en el césped. La Susie me dejó echar una cabezadita, ella sabe hasta donde tirar de la cuerda. Después nos montamos en la Noria, London Eye se llama, está tela de alto y se ve todo Londres, se ve hasta nuestro barrio.
La Susie está lanzada, de vuelta a casa iba planeando las siguientes visitas. Yo le digo “Susie, de verdad que para la próxima me pongo zapatillas de tenis”.

Unknown dijo...

EL TIEMPO

¿Por qué estamos aquí?
He venido a enseñarte el tiempo.
El tiempo. ¿Qué es el tiempo?
Es aquello de allí. Lo que se ve al otro lado del río. ¿Lo ves? Está lleno de dibujos y todo alrededor brilla como un espejo.
Vaya pues yo creía que no era más que otra casa de los antiguos. ¿Cómo puede ser eso el tiempo?
No lo se realmente, sólo se lo que me contó mi madre antes de irse. El tiempo era lo que hacía que todo se moviera, lo que indicaba cuando empezar a hacer algo y cuando terminarlo.
¿Y para eso sirve el tiempo? Nosotros no lo tenemos y sabemos empezar y terminar todo.
Si pero antes no sabían hacer nada si no tenían tiempo, y lo seguían como a un dios. Hasta le pusieron un nombre.
¿No me has dicho que le llamaban tiempo?
Si, pero tiempo es como lo llamaban en todas partes, aquí tenía un nombre muy especial para los que vivían cerca y todos controlaban su tiempo a través de él.
Bueno, y ¿Cómo se llamaba?
Se llamaba Big Ben.

margarita dijo...

EL REENCUENTRO


Jueves, 12 horas,el tictac del reloj no para de perforarme el cráneo,llueve,las aceras están vacías aún a estas horas,espero impaciente los minutos,ella estará allí,sola.
Volaremos juntos.
Tengo que ser prudente, no sospecha nada,va a encontrarse con él,llevará todas las pruebas.
Cabello rizado,pelo corto y abrigo rojo,vuela a Londres,deberé seguirla y abrazarla.
Ahí está,en el asiento 23,tiene mis ojos y mis manos,es curioso como la genética se repite,no hay duda,es ella.
Tantos años perdidos…,la observo,no sé si podré esperar hasta el punto de encuentro, Londres, Big Ben 15 horas, debo esperar a oír su escusa o quizás me siente a su lado y comencemos a hablar como cualquier viajero y oiré su voz y me mirare en sus ojos y con suerte nos cogeremos de la mano.
18 años de ausencias y al final la encuentro.

Arturo dijo...

El partido
El estadio estaba a rebosar, todo eran colores, banderas y bufandas, perritos calientes y coca-cola, griterío que lo dejaban casi sordo, pero que lo estremecían de emoción. Continuaba agarrado de la mano de su padre, de la misma mano que pagó los billetes en la ventanilla a la muchacha de piel pálida pero hermosa, de la misma mano que entregó los tickets al guarda de la puerta mientras esperaban el gesto de asentimiento que les abría el paso a ese caleidoscópio de hierba verde y olor a humedad.
Antes habían paseado por la ciudad, tuvieron varias horas desde que aterrizaran en el aeropuerto de Heathrow en el vuelo de las 15 horas proveniente de Madrid. Paseando era como estar dentro de una de esas postales que tantas veces había visto, todo era igual,excepto la realidad vivida en ese momento; la magnífica torre con el reloj, el río que atravesaba la ciudad de manera pintoresca, la incesante llovizna,¡y hasta los buses rojos y las cabinas de teléfono!. Ahora se alegraba de haber hecho ese último esfuerzo al final del curso, cierto era que con el acicate del premio prometido, pero que no restaba ni un ápice a aquellas horas frente a los libros, apuntes, ejercicios y demás.
Era plenamente consciente de que vivía algo que los unía indefectiblemente, su padre y el, en una ciudad lejana y por una pasión de hombres.

Anónimo dijo...

Fresco. Suave. Muy cálido. Muy suave. No hay viento. La brisa no llega al limite de los dos metros positivos. La sombra de ahora mismo lo calienta todo. En la meta da el sol. Da el sol justo en mi tobillo de impulso. El tartán huele bien. Me gusta el olor de la goma caliente. Antonio me lo advirtió. El tartán de Londres es distinto. No hay dudas. Es historia. Mi historia. El disparo retumbó en el estadio tanto como los gritos,el aliento, el sudor y las lágrimas de cada uno de los que allí estaban, y de los que no. "Más rápido, más alto, más lejos" ...diez vallas. Catorce pasos. Nueve vallas. Quince pasos ¡joder!. "se corre con los gemelos, se resiste con el estomago y se compite con el corazón". Seis vallas. Dieciséis pasos ¡Joder, joder!. "Sin sufrimiento no hay mejora,no hay gloria". ...y no la hay. Pedí que apagaran la tele. Para que seguir... Mi ultima carrera, la compito aquí, en rehabilitación. El tartán de Londres es distinto. No lo he podido luchar.

Anónimo dijo...

No se que distancia hay desde la barandilla al agua.  Cada vez es mayor. Por sentimiento, ya que se aleja en una barca de mierda impulsada por la puta corriente.  No se que distancia hay desde mis putos sentimientos encontrados hasta sus puros sentimientos perdidos.  Pero la distancia es mayor a cada suspiro, ...a cada pestañeo.   A veces las cosas acaban bien, pero esta, lo nuestro, no.  Acaba aquí.  A una distancia indeterminada entre una mierda de vote alejándose de esta mierda de puente icónico de una mierda de ciudad.  Las campanas de esa torre de la izquierda retumbaban en el aire que de no ser porque era una mierda mi vida en ese momento, me sonarían a gloria.  Todo final acaba en el principio de algo.  Y el mío acaba en el principio se mi sentimiento angustioso de soledad.  ...me tomaré un té.  El Big Ben acaba de marcar las cuatro.  Tomaré también unas pastas.  Esas que ella tanto odiaba.

Anónimo dijo...

Caí a los pies de una farola.  Oía.  Veía, mi propia sangre caer gota a gota en el Támesis.  El tiempo va tan lento cuando te estas muriendo...  Escribí en sangre "Poe".  Mi asesino no sabia que significaba, mi hija si.  Ella continuaría, ella lo resolvería.  ...pero no sirvió de nada.  El tipo pisó lo que había escrito, sin darse cuenta.  Me golpeó en el costado hasta caer junto a una de esas gotas de mi sangre que mancillaba la mierda de río donde me hundía.  Lo único que sentía, más que perder el códice de Dirác, era lo fría que estaba el agua.

Anónimo dijo...

En Londres el alcohol es ridículo.  siempre lo pido sin hielo por tal de "cogerla" antes.  Además caliente.  Jajaja...  En cualquier parte del mundo  el whisky esta caliente ...pero el hecho de ser Londres es suficiente.  ¿Por qué controlan tanto el contenido de un whisky?.  Si encima fuera de garrafón ya se forrarían.  No tengo tanto dinero para emborracharme.  Ella vale mas desde luego.  Y duele mas.  Es una puta.  Una santa.  Me gustaría estar en Bilbao y emborracharme de zuritos, que son mas baratos y mejoran el efecto psicodélico de mis delirios.  
- Plis, oder whisky dis preti barguoman.
- Espanol, verdad? -dijo la mujer sin mirarle a los ojos, recogiendo el baso vacío-
- Si, ¿Hablas mi idioma!.
- No, I hate Spain.
- Mi tu, ...mi tu.

Anónimo dijo...

¿De verdad piensas que la tierra, ésta, marrón ennegrecida, granulada, ésta que se escapa entre mis dedos, esta tierra sea de la ciudad de la que seamos, como ésta de Londres, es distinta, mejor tierra, más sabia y lista, honorable y digna que cualquier otra tierra de otro lugar?.  Si estos granos que acaban de escapar de mis manos cerradas entre las comisuras de mis dedos, ahítos y marchitos de dolor y política barata, es más importante que la vida de cualquier irlandés norteño, es pensar que tu vida, Allan, es menos importante que esta misma tierra al otro lado del Canal del Norte.  No dejes que tu sangre fluya como la tierra que acaba de desaparecer de mi mano cerrada.  Somos aquello que creemos poder llegar a ser, no lo que se espera de nosotros.  Somos lo que decidimos.  Hazlo bien.

Anónimo dijo...

EN EL ÚLTIMO MINUTO

Estoy sentado en un banco justo frente por frente del Sloane Square Theater.  Me separa una carretera.  Estoy en una especie de rotonda grande con árboles.  En un "palo" no muy alto ondea estática una placa, creo que metálica, que indica el nombre del sitio exacto donde estoy sentado.  Sloane Square.  La gente camina como si tuvieran prisa.  No se fijan mucho en las cosas.  ...y están en Londres!.  Hace un par de días visité Portsmouth, la casa de Bozifer ...jeje,  que este año es su centenario.  La visita fue como en la película "Mas allá de la vida" cuando Damon se extrae de si mismo y se deja abrazar por aquello que lo rodeaba, el aire que un día rozó la pluma de Bozifer.  Una niña blanca de piel, de pelo, de alma me preguntó algo en inglés que no entendí.  La madre la agarró del brazo y se la llevó ...como asustada.  Debería de haber estudiado inglés.  Porque Theater es cine y no teatro... Cosas que pasan, no?.  La madre y la niña han entrado en el cine.  Hace un rato, el tiempo que llevo sentado, vi el cartel de la película, era infantil.  Tengo orden de entrar al cine.  Además del centenario del escritor es año olímpico, aquí, en Londres.  El mensaje será escuchado.  Ya lo hicieron mis hermanos en los autobuses una vez.  Pero no puedo matar los niños, ...por Dickens?  Mira!, acaba de llegar un autobús.  ¿Plan B?.  

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